31 de octubre de 2010

Recuerdos

Hoy, alguien no demasiado importante, demasiado insistente y demasiado inoportuno, me preguntó o casi me exigió mi obra. Realmente sus pretensiones me sacan de mis casillas, pero decidí buscar en los archivos virtuales aquellas conversaciones que mantenimos ¿Las recuerdas? No he parado de sonreir leyendo mis preguntas curiosas e incluso indiscretas y tus respuestas a mis encerronas, tus poesías y nuestras divagaciones, nuestras crisis y mundos grises. No sé si leerás esto algún día, ni siquiera sé si recuerdas que te hablé de esta página, pero quiero que sepas que te agradezco profundamente todas las palabras que hay escritas en esos 119 mensajes, porque me he visto madurar mensaje a mensaje y todo es gracias a ti. De todo corazón y desde algún lugar de saturno, gracias Tempes.

Sabor añejo

Una mañana te levantas. Eres feliz, pero por un momento te sientes fuera de época, desubicado. No compartes los ideales de la gente que vive contigo, la música que te hacía bailar, ahora te aburre... ¿Y qué haces tú con la melancolía que te invade de repente? Lo más lógico, escuchas música de décadas en las que nisiquiera habías nacido y empiezas a sentirte mejor, lees un libro ambientado en la Edad Media y te sientes mejor, ves una película de los 90 y te sientes mejor.
Al fin y al cabo sólo necesitas algo de ese sabor añejo que te hace olvidarte de todo.

22 de octubre de 2010

Veneno

"Pensar tu nombre ahora envenena mis sueños."
Luis Cernuda

Pocos venenos llegan a ser tan dulces y tan placenteros de sufrir como el amor a la hora de dormir.

17 de octubre de 2010

Perfección (o Utopía)

Para que seas feliz en esta vida sólo debes comprender una cosa: "NADIE ES PERFECTO"
La obsesión por la perfección sólo causa dolor por la búsqueda de algo que es completamente inexistente...
Todos, absolutamente todos, somos imperfectos, pero hay personas que lo aceptan y se miran al espejo a gusto con ellos mismo pensando: "No soy perfecto, pero aún así, sigo siendo feliz, porque tengo más virtudes que defectos" y gente que se ve y sólo es capaz de ver sus fallos.
En esto, como en todo, debemos tratar de ver siempre el vaso medio lleno, porque sólo así seremos felices.

10 de octubre de 2010

Paranoia, éxtasis, particulas en movimiento.

Sube la adrenalina ¿Sientes ya el peligro en las venas?
Te sientas con cuidado. Algunas piedras se pierden abismo abajo, pero da igual...
Con los pies colgando al borde del precipicio todo pierde valor.
Te levantas y te vas sin mirar atrás... Por una vez has sido uno con el universo y su inmensidad.
Sonries. Hoy tu vida ha vuelto a empezar.
Aprovecha el tiempo presente....

7 de octubre de 2010

¡Felicidades, Mario!

Urania. No le habían hecho un favor sus padres; su nombre daba la idea de un planeta, de
un mineral, de todo, salvo de la mujer espigada y de rasgos finos, tez bruñida y grandes
ojos oscuros, algo tristes, que le devolvía el espejo. ¡Urania! Vaya ocurrencia. Felizmente
ya nadie la llamaba así, sino Uri, Miss Cabral, Mrs. Cabral o Doctor Cabral. Que ella
recordara, desde que salió de Santo Domingo («Mejor dicho, de Ciudad Trujillo», cuando
partió aún no habían devuelto su nombre a la ciudad capital), ni en Adrian, ni en Boston, ni
en Washington D.C., ni en New York, nadie había vuelto a llamarla Urania, como antes en
su casa y en el Colegio Santo Domingo, donde las sisters y sus compañeras
pronunciaban correctísimamente el disparatado nombre que le infligieron al nacer. ¿Se le
ocurriría a él, a ella? Tarde para averiguarlo, muchacha; tu madre estaba en el cielo y tu
padre muerto en vida. Nunca lo sabrás. ¡Urania! Tan absurdo como afrentar a la antigua
Santo Domingo de Guzmán llamándola Ciudad Trujillo. ¿Sería también su padre el de la
idea?
La fiesta del chivo, Mario Vargas Llosa.

Gracias a Dios, la genialidad se sigue premiando como se merece. Hoy no puedo hacer más que unirme al clamor que grita: ¡Enhorabuena, genio!

Destino

Quiero que tu cálido cuerpo desaparezca
educadamente y me deje solo en la bañera
porque quiero considerar mi destino.
¡Destino! ¿por qué me encuentras en esta bañera
ocioso, solo, sin lavar, sin siquiera
la intención de lavarme excepto en el último momento?
¿Por qué no me encuentras en lo alto de un poste de teléfonos,
reparando las líneas que van de ciudad a ciudad?
¿Por qué no me encuentras cabalgando a través de Cuba,
un hombre gigantesco con un machete rojo?
¿Por qué no me encuentras explicando máquinas
a pupilos poco privilegiados, españoles negroides,
contentos de que no sea un cursillo sobre escritura creativa?
Vuelve aquí pequeño y cálido cuerpo,
es la hora de otro día.
El destino ha huido y yo te elijo a ti
que me encontraste mirándote fijamente en un almacén
una tarde hace cuatro años
y has dormido conmigo desde entonces.
¿Qué te parecen mis ojos de pescador después de todo este tiempo?
¿Soy lo que esperabas?
¿Acaso estamos demasiado tiempo juntos?
¿Acaso se avergonzó el destino ante la doble toalla turca,
nuestro conocimiento de nuestras pieles,
nuestro amor que es proverbial en todo el bloque,
nuestro acuerdo de que en cuestiones espirituales
yo debo ser el Hombre del Destino
y tú la Mujer de la Casa?
Leonard Cohen

Lo que tenga que ser, será. En alguna parte está escrito que todo acabará por salir bien, que las rachas pasan y que las nubes no nublan el cielo eternamente. Llegará el sol, brillará en el cielo.

6 de octubre de 2010

Miedos.

-¿Qué temes? Te veo temblar.
-Temo enfrentarme a la realidad, que no me guste o que yo no le guste a ella.
-¿Y por eso te escondes en este rincón?
-Sí...
-¡Sal ahí fuera y hazle frente a tus miedos!
-No, puedo quedarme aquí; aquí estoy tranquila.
-Aquí sólo vives una vida vacía